Resulta que, hace menos de una semana, me regalaron una caja con varios cientos de pequeñísimos gusanos de seda. A día de hoy los tengo de varios tamaños. Los más grandes miden ya dos centímetros. Los alimento con hojas de morera.
He ido dando de vez en cuando algunos de los gusanos más pequeños a mis colonias de hormigas, y han muerto algunas obreras en varias colonias. Ninguno de los varios cientos de gusanos ha muerto en la caja. Los gusanos les han encantado, y se los han comido felizmente. También se han comido a las obreras que han muerto. Afortunadamente, ninguna reina ha sido afectada. Las colonias afectadas han sido: Camponotus barbaricus (una obrera). Camponotus cruentatus (3 obreras). Formica cunicularia (una obrera).
Un amigo mío, que es ingeniero de montes y aficionado a la entomología, y a la cría de insectos; me ha asegurado que la morera que uso de alimento no está tratada con ningún producto, y me ha sugerido que las muertes pueden deberse a un cambio brusco en la alimentación de mis hormigas, que hasta ahora sólo comían dieta de Wilson y aguamiel.
Me gustaría poder seguir utilizando estos gusanos como alimento para mis hormigas, antes de que acabe su corto ciclo vital, pero me da miedo de que sigan muriendo hormigas.
¿Algún consejo? ¿Alguien ha tenido una experiencia similar? ¿Alguien puede aclararme qué ha podido pasarles a esas hormigas que han muerto? Por primera vez en el foro, pido: ¡¡¡Ayuda!!!

Un saludo.
